Supongamos que no hay nada de sobrenatural en la aparición de la vida en la Tierra. Supongamos que Dios no existe o que, si existe, no tuvo nada que ver de forma directa con la aparición de la vida – por ejemplo, pudo haber creado el Universo con unas leyes que llevaran fatalmente a la combinación de átomos que produjo la primera molécula autorreplicante. Si aceptamos esta premisa, es necesario concluir que la aparición de la vida se debe a causas naturales, que fue producto del azar el que se encontraran, en la sopa primordial, las moléculas que generaron el primer replicador. Las probabilidades reales de que eso ocurriera son astronómicamente escasas pero a estos efectos no son relevantes: estamos aquí y estamos vivos luego, por muy improbable que fuera que la vida apareciera, el hecho es que apareció.
Supongamos asimismo que todo lo que ocurre en el mundo real está gobernado por leyes naturales. Estas leyes pueden ser simples o complejas y pueden estar a nuestro alcance o no, pero lo que importa es que existen. La materia se organiza de acuerdo a determinadas normas, la energía se comporta de acuerdo a otras normas y el tiempo y la gravedad también responden a esas normas. De acuerdo con esto, todo lo que ocurre en el universo tiene una causa dentro del propio universo y una explicación dentro de las leyes naturales.
Así pues, la evolución de la vida viene regida por estas leyes naturales. Fueron leyes naturales las que gobernaron la densidad de proteínas en la sopa primordial, fueron leyes naturales las que ordenaron la radiación ultravioleta de la tierra primigenia, fueron leyes naturales las que hicieron que las plantas empezaron a liberar oxígeno a la atmósfera, fueron leyes naturales las que hicieron que algunos replicantes se especializaran en unas cosas y otros en otras y que aparecieran los animales, parásitos de las plantas, y la evolución competitiva de estos. Igualmente fueron leyes naturales las que gobernaron el proceso por el que algunos animales se volvieron más adaptables que otros y las que determinaron que adquirieran algo que ahora mismo llamamos inteligencia.
Pero en realidad no hay nada «más» detrás de esto: todo son leyes naturales, todo es explicable por la ciencia.
Lo que pasa es que, si esto es así, la libertad no existe. Si todo es explicable por leyes naturales todo comportamiento del ser humano, por aparentemente libre o incluso aparentemente aleatorio que parezca ser en realidad es perfectamente explicable. Simplemente nos haría falta tener suficiente información respecto a como funciona la vida, como funciona el universo y como funcionan las reacciones químicas que crean eso que llamamos «consciencia» para ser capaces de anticipar en la totalidad de los casos las acciones, reacciones, pensamientos y sentimientos de un ser humano. No existe un «yo» realmente que esté detrás de mis acciones, detrás de mis ojos o incluso detrás de este ensayo, todo lo que existe es una colección de normas inmutables y de átomos ordenados de acuerdo a esas normas. «Yo» no soy libre, aunque me lo crea. Mis sentimientos y pensamientos están determinados desde el principio del Universo. No hay nada que «yo» pueda hacer para evitar ser lo que soy, hacer lo que hago, todo está determinado y es explicable e incluso mis mayores protestas de libertad no son más que reacciones neuroquímicas completamente explicables. Incluso en el hipotético caso de que tenga alma no hay nada que el alma pueda hacer, a menos que tenga poderes mágicos y sea capaz de alterar la realidad física – es decir, mis conexiones neuronales, mi equilibrio químico, mis hormonas – de mi cerebro y, de esa forma, hacerme decidir algo diferente a lo que, por aplicación de las normas naturales, se supone que debería haber elegido.
O sea, que la libertad no existe dentro del orden natural y que, si existe, es necesariamente sobrenatural y tan intangible e indemostrable como Dios mismo.
Arthegarn____________
Como siempre, discusión paralela en Opus Nigrum
Sí, bastante de acuerdo. Un matiz: lo importante no es si las leyes físicas describen, sino si su descripción es determinista. Vamos, aquello que decía Laplace de que si en un momento dado conociéramos todas las magnitudes y sus relaciones podríamos prever el futuro sin error. Que las leyes físicas no sean deterministas es condición necesaria, que no suficiente, para el libre albedrío.
Parece que la física cuántica no es tan determinista sino estocástica; y no por deficiencias en nuestra observación sino esencial a su naturaleza. De todas formas, no me gusta hablar de lo que no entiendo. Como diría Indiana Jones en La última cruzada, «Se ha equivocado de Dr. Sáenz, a quien Vd. necesita es a mi padre».
Por otro lado, este asunto es puramente filosófico, sin que pueda influir en tu comportamiento, pues el determinismo físico no es un fatalismo o una predestinación. No hay nada que «deba» suceder, que esté llamado a suceder en un sentido místico, haciendo irrelevante tus acciones. Es decir, el futuro no está «señalado» o «decidido», sino que simplemente es «consecuencia necesaria» del presente. Ya sé que no estás planteando la existencia del destino, pero hay muchas personas que confunden ambas cosas y concluyen que podemos abandonarnos tranquilamente, y lo que deba ser, será.
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Dale un vistazo a la discusión en Opus Nigrum, que se está empezando a tomar el tema de la personalidad cuántica, Penrose y demás…
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No se puede decir que existan leyes naturales, pienso yo, reconozco que soy un poco constructivista. Todo es un problema de resolución, y de hecho las «leyes» naturales han ido cambiando conforme avanza la ciencia… pienso que las «leyes naturales» son para el humano lo que los colmillos para un león… pero eso no quiere decir que no existan muchas otras maneras de cortar la carne. Creo que el razonamiento es bueno si dejamos de lado esta premisa… yo lo dejaría en (¿eran las vías Tomistas?) si todo tiene un principio y un fin, es decir, si existe la causalidad, se necesita un motor inmóvil que reparta las cartas… pero si la causalidad no existe… todo ha estado siempre, es eterno y la eternidad es un concepto bastante «mágico», me parece, por lo que solo podemos elegir entre Dios o la sospecha de que existe.
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Vale, pero eso tiene poco que ver con la libertad ;-). Se puede concebir un primer motor inmóvil que «pasa» de la realidad…
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Tienes razón…. me fui por los cerros…
Si existe un dios todopoderoso, no puede existir la libertad tal y como la definimos, salvo que la entendamos como en Matrix, la elección está tomada de antemano simplemente vamos comprendiendo porque la tomamos, pero en último termino aunque dios sepa lo que vamos a hacer, la decisión es nuestra. 8)
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Vamos, determinismo puro y duro?
Asi que ya ni la sociedad tiene la culpa, ni mis padres ni mi infancia traumatica. Es el universo que me ha hecho asi señor juez, yo no tengo la culpa de nada puesto que no era libre de elejir asi que me ponga en la calle ya que lo de pegarle 46817684 puñaladas a mi pareja de hecho porque no queria que adoptarmaos una niñita vietnamita para poder sodomizarla entre los dos estaba escrito desde el principio de los tiempos y yo soy inimputable porque me falta el elemento volitivo para cometer delitos, y de paso me de una foto autografiada por Cerolo, que es mi heroe y mi principe azul, el adalid de la politica, el espejo de la clase «dirigente» sin tapujos, unos te dan por el culo de tapadillo pero el al menos lo hace sin ocultarlo, o a lo peor te deja que le des tu tb…
Ando un poco alterado pero es que las alusiones al determinismo en estas fechas tan señaladas me llegan al alma, que estoy con la «regla» y me da igual que lo justifiquemos en unas leyes naturales, acontecimientos sociales o lo que queramos. Una cosa es la causalidad que se puede demostrar mas o menos y otra conformarse con decir que la unica pega del determinismo es que no teniamos conocimiento d que elhecho de que un malayo se la sacuda 3 o 4 veces al mear va a afectar mis accioens mediante comlejos calculos basados en leyes matematicas, fisicas, morales o de cuaquier tipo…
Intentar encontrar esas «leyes naturales» que permitirian predecir el futuro ya ha dado pie a muchos libros (algunos muy majos aunque generalmente de aventuras o suspense) y sectas y visionarios, estoy de acuerdo en seguir dejando el juguete al alcance de todos, pero las leyes de cualquier tipo hay que demostrarlas y me temo que es objetivamente imposible a fecha de hoy, sea por determinismo o magia o libertad.
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Lo que pasa es que si se admite la premisa de la causalidad, el caos deja de existir. Sin caos no hay libertad (y con caos tampoco, claro…).
Conste que no es lo que creo, yo creo en Dios. Pero nunca me había dado cuenta de que hay que creer en lo sobrenatural para creer en la libertad.
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Supones, presupones y aceptas suposciones que supones crees que pueden o no existir.
Es decir, «supongamos que…» ni siquera cuando te escriba esto tu existas en mi realidad existencial.
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FTSOTA, sí.
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El problema es que las leyes naturales tal y como las describes no son más que simplificaciones a gran escala de otras mucho más complejas, a pequeña escala, cada vez más pequeña, hasta llegar a la física cuántica, en la que no hay certezas sino probabilidades. Mayores, menores… da igual. A gran escala, despreciando el error, la gravitación universal parece inamovible, pero a pequeña escala… ¿por qué vuela un abejorro si su forma es absolutamente anti aerodinamica? He aqui la incertidumbre de la pequeña escala, donde todo es posible…
Entramos en los sistemas complejos y la teoría de caos.
El universo tiene reglas, como las tiene el ajedrez. Pero eso no significa que solo sea posible una partida. Al contrario. La libertad existe, sometida a condicionantes, pero existe.
Los sucesos de una vida son los que son, y la manera en que cada ser humano los acepta y los asimila para crear una base de personalidad que le hará reaccionar de un modo u otro ante cierto estímulo depende de muchos factores. La genética. El entorno. El momento y el lugar. Los antecedentes. La mariposa que bate sus alas. Demasiada información. ¿Se puede predecir? Hasta cierto punto. Porque siempre hay factores que se escapan. Factores pequeños. Factores cuánticos, en los que A puede originar B, o C, o incluso D. Ahi está la libertad. Como el demonio, en los detalles.
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Te comento lo mismo que a Lord Warden, pásate por la paralela en Opus Nigrum que estamos empezando con la personalidad cuántica.
El problema es que la indeterminabilidad cuántica (o la extracausalidad) sólo hablan de azar puro y de conceptos aleatorios puros. Lo que es observable es aleatoriedad, no libertad, a menos que afirmes que «yo» tomo la decisión a nivelcuántico y que «yo» afecto la realidad a nivel cuántico…
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Hombre, por el mero hecho de existir afecto a la realidad, y ese efecto se ve a nivel supraatómico, cuanto más a nivel subatómico… lo chungo sería afirmar la escala contraria, decir que mi masa afecta la trayectoria de la órbita terrestre, que si, es posible que la afecte, pero a nivel infinitesimal, prácticamente a nivel… si, cuántico.
Piénsalo de este modo: que tu tomes una ducha por la mañana o que lo hagas por la noche es vital para generaciones de microorganismos que viven en tu epidermis. Pueden irse por el desagüe, o vivir una feliz micro existencia y ser sus hijos o los hijos de sus hijos los que vayan a parar al tubo sifónico… tus decisiones son macroscópicas, afectan de ahí para abajo.
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Como la ley de la gravedad es universal, entonces la libertad no existe…
Es cierto, todo el mundo sabe que existe una relacion entre la velocidad y el tocino…
Definamos primero libertad y ya escojamos. «La palabra libertad designa la facultad del ser humano que le permite decidir llevar a cabo o no una determinada acción» (es.wikipedia.org/wiki/Libertad) o bien: «Uno de los bienes más preciosos de la imaginación, que nos permite eludir cinco o sies entre los infinitos métodos de coerción con que se ejerce la autoridad» (www.riveonline.com/index.php/blog/show/DICCIONARIO_DEL_DIABLO_VIII.html), o en otro sentido: «La real determinación de asumir nuestro ser y nuestra naturaleza» (sabanet.unisabana.edu.co/derecho/fundamentacion/derechon/derecho%20natural/Glosario.htm).
En todos los casos podemos asumir que es una caracteristica exclusiva de los humanos, tanto en cuanto que los humanos somos los unicos seres inteligentes (o pensantes)…
Es decir que el concepto de libertad es intrinseco y exclusivo al ser humano y al ejercicio de su inteligencia y voluntad…
Intentar negar las leyes naturales solo en relacion a la propia voluntad, no es una muestra de libertad, es desde mi punto de vista una estupidez o una demostracion de determinismo absurdo…
Me recuerda terriblemente a la clasica «demostracion» de la tortuga y la flecha…
Y diga lo que diga la filosofia: la tortuga continua siendo atravesada.
Ya el traspolar sobre la existencia de la libertad y deducir de ello la existencia o no de Dios, mas me parece el producto de una larga noche de insomnio trasegando abundante alcohol y/o otras sustancias estupefacientes, que otra cosa…
Por no decir que al igual que la libertad, podriamos estar discutiendo sobre cualquier otro concepto (amor, honor, fidelidad, lealtad, crueldad, bien, mal….) que son exclusivos del pensamiento racional, es decir de la mente (o el alma) humana…
En serio, cariño: Olvidate de intentar demostrar racionalmente tu fé…
Tu ¿crees en la existencia de un ser divino y superior? Pues perfecto…
¿Que los demas piensan que estas equivocado ? Pues perfecto tambien y dejales felices en su creencia…
¿Que necesitas reafirmarte de manera logica en tus convicciones? Sera tal vez porque en el fondo, estas no son tan firmes…
No, no todo se puede explicar con logica o con «exactitud» cientifica… ¿Y?
El mundo frio, racional y logico ¿Acaso te ofrece mejores alternativas? ¿Resulta mas satisfactorio?
Pues eso, dejales con sus «teorias del campo unificado» y continua con tus creencias, si estas te sirven y te hacen feliz…
Despues de todo nadie puede demostrar que tiene la razon…
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Si que es demostrable, pero los que pueden hacerlo jamás lo harán precisamente porque con ello demuestran que llevan la razón y las de ganar.
Dijé
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En todos los casos podemos asumir que es una caracteristica exclusiva de los humanos, tanto en cuanto que los humanos somos los unicos seres inteligentes (o pensantes)…
Es decir que el concepto de libertad es intrinseco y exclusivo al ser humano y al ejercicio de su inteligencia y voluntad…
No. Que la libertad (de existir) sólo se manifieste en los seres humanos no quiere decir que se manifieste en todos ellos ni que sea una característica definitoria (intrínseca) a lo que es el ser humano. Si quieres definir «ser humano» como «ser humano provisto de libertad» no te lo voy a discutir FTSOTA, pero estás dejando fuera a los locos, a los niños, a los inconscientes y a los que están en coma.
El traspolar sobre la existencia de la libertad y deducir de ello la exiistencia o no de Dios (…)
No va por ahí. Este artículo, como tantos otros, en realidad no es mío sino un poutpurrí de cosas que he ido aprendiendo de por aquí y de por allá, a mi no me afecta. No me afecta porque yo creo en Dios y en lo sobrenatural por lo que puedo refugiarme en el «bueno, no me importa lo que diga la Ciencia, yo creo en la libertad como creo en Dios, aunque no haya pruebas». No, si alguien tiene esta visión (o una semejante) es nuestro querido Sr. Kelsey.
Eso no es que me de igual. Me repatea. Me repatea recurrir a la Fe, como sabe todo aquel que haya leído El Dios o la Nada. Más aun cuando, a diferencia del caso del Rinoceronte Fosforito, la evidencia está claramente en contra de mis creencias como en este. No me gusta recurrir a la Fe más que con los Dogmas y, si bien el hecho de que la condición humana es necesariamente libre es un Dogma, nunca había tendo que recurrir a la Fe para sostenerlo.
Y sí, con esto mantengo que es tan irracional creer que el ser humano es libre como crer que Dios existe, pero eso no implica (ni es lo que quiero demostrar) que sólo si Dios existe es libre el hombre.
Por no decir que al igual que la libertad, podriamos estar discutiendo sobre cualquier otro concepto (amor, honor, fidelidad, lealtad, crueldad, bien, mal….)
Todos ellos, secundarios y accesorios de la libertad.
No, no todo se puede explicar con logica o con «exactitud» cientifica… ¿Y? El mundo frio, racional y logico ¿Acaso te ofrece mejores alternativas? ¿Resulta mas satisfactorio?
No, pero a mi no me convenzas (con esos argumentos), yo ya creo en Dios. Háblale al guiri. Es muy unamuniano, ya sabes, «antes la verdad que la paz»…
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Leete «La nueva mente del emperador», de Roger penrose. Trata precisamente del problema del que hablas. De todas formas el principio antropico hace que tanto de igual que nos haya creado dios o no, que haya determinismo o no. Te lo preguntas por el hecho de existir. La pregunta no tiene sentido fuera de ese contexto.
Despues de haberte leido «La nueva mente del emperador», puedes probar con «Godel, Escher y Bach», un libro con trampa. Si te lo hubieras leido y entendido correctamente, lo utilizarias sin duda como arma indestructible para atacar a la ciencia. Aunque si te lo hubieras leido y entendido, no creo que necesitaras armas para atacar a la ciencia en nombre de la fe.
Al margen. Si hay determinismo o no. Si lo hubiera… ¿no seria maravilloso que algo tan increiblemente grande y complejo como el universo hubiera generado, en su unico caminio posible, un ser capaz de preguntarse a si mismo si tiene libertad, aun no teniendola?
Mete «determinismo» en el buscador de mi web. Probablemente encuentres material interesante.
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¿Qué pasa, Zor?
Llegas un tanto tarde, ya me han recomendado a Penrose. Pero pásate por la paralela de Opus Nigrum, donde estamos con el tema de la consciencia cuántica y por qué no me vale (nos vale, debería decir, a Julian y a mi) para justificar la existencia de la libertad a partir de estas premisas. Aceptando que a nivel quántico el universo no es determinista porque los sucesos son aleatorios (sin el menor problema) eso lo único que demuestra es que hay un componente aleatorio en nuestra consciencia. El hecho de que sea posible qie no siempre elijamos lo mismo dadas exactamente las mismas circunstancias no implica necesariamente la existencia de libertad, sino la de mero azar. Si tengo dos explicaciones posibles para el mismo hecho, la más simple es la de que lo único que existe es azar, no azar + libre albedrío, por lo que el libre albedrío se cae por navaja de Occham. Pero insisto, pásate por Opus.
La maravilla de la que hablas, si bien me parece maravillosa, me parece un triste consuelo para la inexistencia de libertad.
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