La culpa es de la Merkel

Antes de empezar, un caveat: Arthegarn el Peregrino no se hace responsable de la veracidad o el ajuste a la realidad de las teoría económica aquí expuesta. Este artículo es principalmente informativo y no refleja mi opinión al respecto. Habrá una segunda parte próximamente en la expresaré, pero no en este.

Estoy seguro de que todos, o al menos una gran mayoría, lleváis algo así como dos años oyendo decir que el Banco Central Europeo (“BCE”) sigue exclusivamente los dictados de Alemania o que hace lo que a Alemania le conviene y lo que a España le perjudica. Ya sabéis que yo no soy nada dado a las teorías de la conspiración, pero creo que es tanto importante como interesante analizar un poco en profundidad por qué tantos economistas de prestigio dicen esto y si es cierto.

Lo que hoy conocemos por la “ortodoxia económica”, es decir los economistas que siguen la escuela mayoritaria (los mainstream, vamos) se basan en una idea bastante sencilla, pero no por ello menos genial, de John Maynard Keynes(1), recogida en su indispensable Teoría General de la Ocupación, el Interés y el Dinero (generalmente conocida como la “Teoría General del Dinero” o simplemente “Teoría General”) de 1936. Esta idea se resume en la siguiente fórmula:

  Y=C+I+G+(X-M)  

donde:

Y es la Demanda Agregada,
C es el Consumo ,
I es la Inversión ,
G es el gasto público,
X son las exportaciones y
M son las importaciones.

¿Y todo esto qué quiere decir? Bien, la Demanda Agregada es la suma de todas las demandas de bienes y servicios en la economía de un país (en un momento y nivel de precios dado) y que esa economía puede pagar.

Como todos sabéis, la economía de mercado se basa en el intercambio de bienes y servicios por otros bienes y servicios, en muchos casos representados por el dinero. Supongamos que tenemos una economía limitada a dos personas: Caín y Abel. Caín, que es agricultor, está harto de comer zanahorias y Abel, que es pastor, se encuentra bastante decaído por su falta de vitaminas. Abel quiere zanahorias (v.gr. tiene demanda de zanahorias) que a Caín le sobran (tiene zanahorias que ofrecer, v.gr. oferta de zanahorias), y viceversa con las patas de cordero, así que como son buenos hermanos y no se van a poner a regatear intercambian esos bienes y satisfacen sus mutuas demandas con sus mutuas ofertas. Y antes del intercambio, la demanda agregada de la economía de los hijos de Adán y Eva era de [una pierna de cordero + un manojo de zanahorias].(3). Si esta idea básica la multiplicamos por 23.000.000 y traducimos todas las demandas específicas por su valor en dinero nos sale que, por ejemplo, la demanda agregada de un país como España es de, digamos, un billón y medio de euros.

El Consumo es exactamente eso: la cantidad total de bienes y servicios consumidos en un periodo de tiempo . En el ejemplo anterior, el consumo sería igual (una vez efectuada la transacción entre los hermanos) a [una pierna de cordero + un manojo de zanahorias]. (4)

La Inversión es, para que nos entendamos, el ahorro. Es la cantidad de bienes y servicios que se producen pero no se consumen inmediatamente, sino que se reservan para consumirse después. Este ahorro puede hacerse básicamente de dos maneras: metiendo el excedente bajo el colchón para usarlo luego, o entregando el excedente a un tercero a cambio de la promesa de una compensación en el futuro. Por ejemplo: Caín tiene dos manojos de zanahorias y Abel tiene una oveja embarazada. Los dos tienen hambre. Caín se come un manojo de zanahorias y ahorra el otro, hasta aquí todo claro. Pero Abel no ha comido y no quiere matar a su oveja antes de que tenga el cordero, así que le pide a Caín que le de el manojo de zanahorias a cambio de una participación en las ganancias de su negocio ganadero, i.e.: medio cordero cuando nazca(5), y de esa manera el ahorro (concepto de andar por casa) se convierte en inversión (concepto de andas por casa).(6)

El Gasto Público no es en realidad lo que gasta el Estado, sino la diferencia entre lo que gasta y lo que recauda. En una economía equilibrada el Estado debería gastar lo mismo que lo que recauda así que este valor debería ser cero, pero no todas las economías son equilibradas. A veces el Estado gasta menos de lo que recauda y se produce algo llamado superávit mientras que otras (muchas más) gasta más de lo que recauda, generando un déficit, palabra que nos es mucho más conocida que la anterior.

Y por último las importaciones y exportaciones sí que no requieren (de momento) mayor explicación: todos sabemos lo que son.

Vale, muy bonito pero, todo esto ¿para que sirve? Bien, el modelo de la demanda agregada keynesiano permite predecir, en teoría, el efecto que tienen todas estas variables la una sobre la otra y sobre otros factores económicos como el paro o la inflación, y ayudan a determinar la política económica y monetaria de los gobiernos en función de sus objetivos. Por ejemplo, supongamos un país con una tasa de paro muy alta, o asomémonos por la ventana para verlo si carecemos de imaginación. ¿Cómo podemos solucionar esa alta tasa de paro? Bien, el paro se produce cuando no todo el mundo está produciendo bienes o servicios, y como la oferta es igual a la demanda, si no todo el mundo está produciendo bienes o servicios es que la demanda agregada de ese país es menor que su oferta. En otras palabras: podríamos producir más, pero es que ya nos estamos gastando todo el dinero que tenemos en comprar lo que producimos ahora (y en ahorro y en importaciones, claro). No hay más demanda que cubrir, así que no hay más producción, así que no hay forma de salir del paro. A menos…

A menos que aumentemos artificialmente la demanda agregada, claro. Si el país produce bienes y servicios por un millón de euros está consumiendo bienes y servicios por un millón de euros, yo te doy algo a ti y tú me lo das a mi, yo trabajo en una zapatería y el dueño me da un salario, yo le doy dinero al de la verdulería y él me da zanahorias, el verdulero le da dinero al zapatero y se queda con los zapatos que he hecho… Al final el flujo de dinero, de bienes y servicios, es circular, lo que sale de un bolsillo siempre va a parar a otro, y de ahí a otro, y de ahí a otro… Así que ¿qué pasaría si yo, el Estado, empezara a demandar más bienes y servicios, en otras palabras, si aumentara el gasto público? Pues según la teoría keynesiana, insisto, que es la ortodoxia económica generalmente aceptada, si la demanda agregada de un país es de, por ejemplo, cien, y yo aumento el gasto público en diez, la demanda agregada pasa a ser de ciento diez. Eso hace que haya que, para cubrir esa demanda agregada, sea necesario producir diez más que, en este momento, la economía no puede producir. Así que ¿cómo satisfacer ese incremento en la demanda? Pues solo hay una forma: incrementando la oferta. Y solo hay una forma de incrementar la oferta, que es incrementar la producción. Y solo hay una forma de incrementar la producción, que es contratar a más gente. Así que et voilá, si incrementamos el gasto público “activamos” la economía y hacemos bajar el paro, con lo que generamos más riqueza y todos contentos

Claro que ¿cómo se las puede ingeniar el Estado para aumentar el gasto público? Bien, en una economía equilibrada eso solo puede hacerse subiendo los impuestos, pero como ya hemos visto eso en realidad no incrementaría la demanda agregada, ya que el gasto público es la diferencia entre lo que el Estado gana y lo que gasta. Así pues la única forma de que el Estado incremente la demanda agregada es que gaste más de lo que ingresa, en otras palabras, que genere déficit. Y este déficit se puede generar de dos maneras básicas: (i) bajando los impuestos y gastando lo mismo o (ii) pidiendo prestado dinero (deuda pública) para gastarlo ahora. O las dos cosas a la vez, claro. Así que el remedio económico contra el paro es aumentar el gasto público, bajar los impuestos y aumentar el déficit(7). Y ¿en qué gastar ese dinero extra que voy a inyectar en la economía? Pues, de acuerdo a esta teoría económica… ¡da igual! Lo importante es activar el consumo, que genera demanda, que genera producción, que genera puestos de trabajo. Cómo se haga es irrelevante porque el flujo de dinero es circular: da igual a quien se lo des, lo importante es que lo gaste. Da igual que le des un subsidio a un parado que que hagas obras públicas (y las constructoras tengan que contratar más gente porque no dan abasto) o que amplíes el ejército o que contrates más funcionarios. Lo importante es inyectar dinero y que la gente se lo gaste. Ahora que tienen dinero, los soldados y los funcionarios podrán irse de cañas lo que aumentará la demanda de cerveza, lo que aumentará la producción de cerveza, lo que hará que las cerveceras contraten más gente. Y los productores de cebada, y los transportistas de cerveza, y los técnicos de reparación de grifos de cerveza, y los fabricantes de vasos, y los distribuidores de banderillas, y… Como el flujo de dinero es circular y todo va de un bolsillo a otro no importa en qué bolsillo empiece, lo que importa es que se gaste, y este aumento del consumo lleva consigo un efecto multiplicador de la riqueza, ya que a mayor consumo, mayor cantidad de gente con trabajo, más gente que tiene que gastar, más demanda, más consumo, más producción, menos paro. Todo a cambio de un poco de déficit que, de cualquier forma, se “paga solo”, ya que el aumento de actividad económica trae consigo un aumento en la recaudación sin necesidad de subir los impuestos, y con ese aumento de la recaudación podremos sanear nuestro déficit y volver a equilibrar el Estado.

Así pues, la solución de Keynes para el problema del paro está clara: aumentar el déficit y estimular la economía. Y a grandes rasgos, en esto está de acuerdo el 95% de los economistas.

Y, si esto es así y está así de claro… ¿por qué el imbécil de Mariano no lo está haciendo? Pues muy sencillo: porque el tratado de Maastricht, los pactos de estabilidad, no se lo permiten. En teoría ningún estado miembro del euro puede tener un déficit presupuestado superior al 3% ni una deuda pública superior al 60% del PIB, y en España vamos por el 8,5% y el 72,15% respectivamente. ¿Y no podrían mirar hacia otro lado nuestros socios europeos y dejarnos aumentar un poco más el déficit, que es lo que dice la ortodoxia económica que tenemos que hacer para salir de este embrollo con un 22% de paro? ¡Que no pedimos nada que no esté en los libros! O, al menos, ¿no podría el BCE bajar los tipos de interés, que es la otra gran medida (junto con la devaluación, claro) con la que cuenta el estado para estimular el consumo?

Bien, pues no voy a establecer una relación causa efecto (para eso se bastan y se sobran ciertos analistas) pero voy a dar dos datos adicionales.

El primero es que todas estas medidas de estímulo a la economía tienen un efecto secundario: la inflación. Cuando la gente tiene más dinero quiere consumir más, y como pasa un tiempo entre que la gente quiere consumir más y que el tejido productivo efectivamente produce más (en lo que se crean nuevas empresas, se contrata a la gente, se construyen fábricas, etc.) ese incremento de la demanda sin incremento de la oferta conduce a un incremento de los precios. Y, como todo el mundo sabe, la inflación es mala, mala, mala y controlar la inflación es la tarea fundamental de todo gobierno o banco central (por ejemplo es el objetivo tanto del BCE como de la Reserva Federal), así que este tipo de medidas deben evitarse siempre que sea posible, de hecho solo son justificables para solucionar un problema de paro anormalmente elevado y deben abandonarse en cuanto sea posible para evitar la aparición de burbujas y el sobrecalentamiento de la economía.

El segundo es que el paro medio en la UE es del 10,2%, en la zona Euro del 10,7% y en Alemania es del 5.6%. Así que las medidas que conviene aplicar en España no son en absoluto las que conviene aplicar en la Eurozona. Muchísimo menos en Alemania, o en Austria, o en Holanda. Hasta en Grecia tienen menos paro que nosotros.

Y eso es todo. Así que, recordando una vez más que este artículo no refleja necesariamente mi opinión, sino que simplemente intenta explicar por qué la mayor parte de nuestros economistas están diciendo que la culpa es de Alemania y sus compinches y del Banco Central Europeo que no nos permiten aplicar las recetas y políticas que necesitamos para salir de esta sino que únicamente aplican las que les convienen a ellos; recordando que éste artículo es básicamente divulgativo así que contiene simplificaciones e inexactitudes en las que he incurrido adrede para aumentar la claridad; y sugiriendo enérgicamente a quien le interese el tema que lea libros de expertos de verdad y no asigne valor de dogma a los artículos del blog de un gótico liberal que se cree muy listo y muy leído pero que en su vida ha pisado una facultad de Económicas, se despide de ustedes hasta su próximo ladrillo, agradeciendo su atención y fidelidad,

Arthegarn, el Peregrino_______________________

(1) Sin duda el economista más influyente del siglo XX y un tipo que, personalmente, me cae francamente bien. Hijo de un profesor de universidad y de una de las primeras mujeres que cursaron estudios superiores en Reino Unido, extremadamente inteligente, bicurioso (¡en la Inglaterra de entreguerras!) amigo de Bertrand Russell, encumbrado a la cámara de los Lores con un premio Nóbel y una baronía, casado con una bailarina de la que siguió enamorado toda su vida, padre de un científico y de un aventurero…
(2) El patrón oro era una forma de medir el valor de una moneda en términos de cuánto oro representaba. De acuerdo al patrón oro, un Estado respondía de su papel moneda con el oro que tenía en sus reservas, de tal forma que dividiendo la cantidad total de oro en reservas del estado en cuestión entre la cantidad de su moneda que había emitido se podía obtener un criterio objetivo sobre su valor comparado con otras monedas. Así, por ejemplo, una peseta podría representar medio gramo de oro y una libra cinco gramos con lo que tendríamos que una libra vale diez pesetas. Idealmente los titulares de billetes y otros vehículos comerciales con valor representativo (a diferencia de, por ejemplo, una moneda de oro, que vale tanto como el oro del que está compuesta) podían comparecer ante el banco central del estado emisor y exigir su cambio por la cantidad correspondiente de oro. Históricamente el patrón oro es el origen de aquella frase que había en los billetes españoles del sigo pasado que decía: “El Banco de España pagará al portador X pesetas”, teniendo en cuenta además que la peseta empezó siendo una fracción del peso, moneda de valor intrínseco que contenía 27 gramos de plata y valía exactamente eso.
(3) Llegados a este punto es importante insistir en que la oferta y la demanda no son solo de cosas (”bienes”) como zanahorias y patas de cordero sino también de servicios, es decir cosas que alguien hace por nosotros porque nosotros no podemos o no queremos hacerlas. Así, Caín puede querer satisfacer sus bajos instintos y ofrecerle un manojo de zanahorias a una nefilim que pasaba por ahí a cambio de… am… bueno, de sus “servicios”.
(4) Es fundamental para lo que vendrá después mencionar que, en teoría económica clásica ( sea, esta), la oferta y la demanda son siempre iguales (o tienden a serlo con el tiempo vía ajuste de precio). En el ejemplo anterior la oferta (cordero y zanahorias) es igual a la demanda (zanahorias y cordero). Si incrementamos la oferta de, digamos, zanahorias, al final lo único que ocurrirá será que bajará el precio de las mismas y que una pierna de cordero ya no valdrá cinco zanahorias sino, por ejemplo, diez, y volverán a equipararse oferta y demanda. Lo mismo ocurriría si aumentáramos la demanda de cordero o redujéramos la oferta de zanahorias: al final oferta y demanda se equilibran vía precio.
(5) ¿Y por qué medio cordero y no simplemente una pata, que es lo que valía un manojo de zanahorias en el ejemplo anterior? Porque no vale lo mismo una pata de cordero ahora que una promesa de darte una pata de cordero en el futuro si todo va bien: a lo mejor la oveja se escapa, por ejemplo, y Caín se queda sin su pata de cordero Y sin su manojo de zanahorias, que Abel ya se habrá comido. Este fenómeno, llamado traslación del riesgo, es lo que da origen a los préstamos con interés, en los que el riesgo asumido por el prestamista se compensa por el prestatario ofreciendo devolverle una cantidad mayor que la prestada. Por supuesto, cuanto menos se fie el prestamista del prestatario mayor tendrá que ser la compensación: no es lo mismo prestarle cincuenta euros a tu hermana que prestárselos al vago de tu amigo Pepe que prestárselos a Ruiz-Mateos, con que mi hermana me prometa devolverme el capital me vale, pero Pepe igual me tiene que prometer que me devolverá 55 dentro de un mes para que se los preste (y solo lo haré si creo que de verdad podrá tener esos 55 euros dentro de un mes) y a Ruiz-Mateos no le presto 50 euros así me ofrezca devolverme esos 50 euros y cinco millones más, porque sé que llegado el plazo no voy a ver un céntimo. Complicando mucho las cosas, eso es la prima de riesgo esa que tanto nos trae por la calle de la amargura: la gente se fia más de su hermana Alemania que de su amiga España y no pondrían un duro en Grecia si no les obligaran.
(6) En el mundo real, además, está conversión es mucho más perfecta e inmediata ya que la inmensa mayor parte del ahorro está en un banco, no debajo del colchón, y ese banco lo presta (es decir, lo invierte) en cuanto puede.
(7) Y también bajar los tipos de interés, por ejemplo, pero no quiero complicar más el modelo. Si el Estado baja los tipos de interés el ahorro se hace menos atractivo, recordemos el ejemplo de (5). Si el tipo de interés está muy alto cogeré mi dinero y lo ahorraré porque me va a rentar mucho, si presto cien y en un año me devuelven ciento diez estoy haciendo un buen negocio. Pero si presto cien y en un año me devuelven ciento uno… pues es menos atractivo, oye, para eso cojo esos cien y me voy de cañas.

31 opiniones en “La culpa es de la Merkel”

  1. Psche, sera donde vives tu. En mi entorno la crisis español, el fiasco de la eurozona, la crisis bancaria estadounidense, el credit crunch y basicamente todos los problemas del mundo mundial de la ultima decada son culpa de Zapatero.

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  2. Casi como un vulgar «tribulete» has buscado a proposito un titular llamativo, querido…Y si sin duda «Alemanía es culpable», claro que para explicar el porque jamas un alemán entrará en «el juego de la inflaccion» habria que escribir otro «tocho» incluso mas grande explicando la importancia del inconsciente colectivo y de la cultura oral y sobre el impacto producido en todas las generaciones de alemanes esos billetes de 100.000.000 de marcos que se usaban para comprar el pan….En resumen: «Versalles es culpable».

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    1. A algunos les puede parecer casi «prehistorico» pero resulta casi estremecedor el comprobar como Europa y el mundo, continua hoy mismo pagando aquel terrible e inmenso error que supuso Versalles y sus tratados añadidos… Si se puede hablar de «oportunidad historicas tragicas que poder solucionar con un viaje en el tiempo» sin duda estamos (junto con la destruccion de la gran biblioteca de Alejandria, la noche anterior a la Quatre Bras y alguna otra mas) ante una de sus mas firmes candidatas….

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      1. A algunos les puede parecer casi «prehistorico» pero resulta casi estremecedor el comprobar como Europa y el mundo, continua hoy mismo pagando aquel terrible e inmenso error que supuso Versalles y sus tratados añadidos… Si se puede hablar de «oportunidad historicas tragicas que poder solucionar con un viaje en el tiempo» sin duda estamos (junto con la destruccion de la gran biblioteca de Alejandria, la noche anterior a la Quatre Bras y alguna otra mas) ante una de sus mas firmes candidatas….

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  3. Un artículo muy interesante y clarificador. A ver la segunda parte que también será interesante. Tienes la virtud de resultarme más legible que los artículos de muchos economistas, se nota que lo de escribir se te da bien.

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    1. En las primeras versiones del artículo había una breve explicación de qué representa el dinero en términos de la riqueza de un país (que incluía la frase “eliminado el patrón oro”) para poder introducir el mecanismo de la variación del tipo de interés y la devaluación como otras políticas que los Estados pueden seguir para estimular la economía según el modelo clásico, pero al final decidí quitarlo porque me parecía que complicaba aun más un artículo que ya era exigente de por si.

      ¡Y gracias por el piropo! Se intenta ser claro en lo posible, sí. De cualquier forma ya sabes que en España la gente que habla de economía, sepa o no sepa del tema, suele estar mucho más interesada en demostrar todo lo que sabe de economía que en que el otro le entienda. Es un poco como cuando los góticos hablan de música…

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  4. La gente de este país no se lo merece, como los supuestos progresistas meten en el mismo saco al país entero como si toda Alemania fuera Merkel me cabrea.

    ¿Sinceramente? Yo creo que la culpa es de el español medio que no pierde tiempo a la hora de culpar de todos sus problemas al planeta entero.

    Mientras tanto consentir, consentir, consentir… Nunca intentar cambiar a mejor.

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    1. O tal vez, sin caer en lo de defender el país en el que vivo ahora mismo. Tal vez si los españoles hubieran visto a su país reducido a cenizas y arruinado dos veces en menos de un siglo y luego verlo de nuevo amenazado por las malas gestiones de otros, tal vez entonces lo verían de otro modo.

      A pesar de todo el pueblo aquí pide solidaridad para con el resto de Europa, me gustaría ver a España haciendo lo mismo en su lugar…

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      1. Bueno, Allan, convengamos igualmente en que si Alemania se vió reducida a cenizas dos veces fue bastante por su propia culpa y que en la reconstruccion de verdad «algo» tuvo que ver ese Plan Marshall que por cierto con las limitaciones de deficit «constitucionales» que esta imponiendo «domina» Merkel seria absolutamente imposible legalmente….

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        1. Esas limitaciones de las que hablas son constitucionales en Alemania. Y, a diferencia de lo que pasa en España, los alemanes se toman en serio el cumplimiento de la Ley y tienen un Tribunal Constitucional digno, independiente y que ejerce una verdadera función de control al Gobierno y de división de poderes. No lo veas desde la óptica de este país de mercadillo en el que cuando el TC dice algo es porque se lo ha susurrado antes el Gobierno, allí de verdad que Merkel tiene las manos atadas a ciertos niveles porque la división de poderes de verdad funciona.

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      2. Yagami, que eches la culpa de esta mierda inmensa al español medio te hace perder como poco 50 puntos de carisma. Y que creas que el español medio es ahora el mismo que hace unos 20 años, otros 50 puntos menos .

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        1. ‎Ok, vale, ¿me das ahora una explicación coherente y no una Stat RPG?.

          Somos una democracia; la gante HA CONSENTIDO: han CONSENTIDO con su voto bipartidista, con su criticar a la derecha siempre y mirar a otro lado cuando la pifia la izquiera, con su votar al PP a ciegas porque PSOE quiere dividir el país, con su desinformación total sobre como funcionan tanto política y economía a nivel global (Ahora todo diós tiene internet, estar desinformado no tiene excusa, pero tiempo para rebozar facebook con memes de mierda si que hay, si).

          Así que si, lo creo; el que los políticos hagan lo que les da la gana es porque saben de sobra que aquí ni diós se va a mover. La democracia es tambien una responsabilidad, pero como ya nadie se acuerda, hemos consentido.

          Mucho se habla pero nadie sabe cómo ir mas allá de una manifa y una declaración de intenciones.

          Te invito ahora a demostrar que estoy equivocado, a ser posible con unos argumentos mejores que el perder puntos de carisma imaginarios de alguien que no me conoce (pero que me ha dejado bastante claro su nivel de tolerancia hacia ideas diferentes a las suyas)

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          1. ‎1º cómo que no te conozco, mamón??? ¬.¬

            2º la culpa es de los aprovechados o de los que dejan que se aprovechen de ellos? Respondo: de los 1os. Por qué? porque hasta donde yo sé, dejarse robar, estafar, timar, etc etc etc aún no es delito en este país. Lo que hacen los políticos, sí. El problema es que los que legislan son los mismos que se aprovechan ; y si encima unes eso al sectarismo, gregarismo y paletismo de la mayoría de la población, aparte de tener a cierta clase de gente que se aprovecha del sistema, los tienes dirigiendo el sistema. En otro orden de cosas, lo que más me ha molestado es el uso gratuito de «español medio». Qué es para ti el español medio? porque para el presidente de la CEOE es un tipo que tiene piso en propiedad y 100.000 euros ahorrados (está el video por ahí, si te da morbo te lo busco). Para mí el español medio está bastante más abajo que eso, y te aseguro que en los últimos lustros pocos han vivido por encima de sus posibilidades 😉

            Un saluten.

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            1. Coño, no te reconocía xDDD (sorry :/ )

              Debí de concretar: Español medio me refería al español de idea política tan definidas como desinformadas y victima del pensamiento colectivo.

              Mi argumento va en el contesto de este post, no culpo a TODOS los españoles de TODO lo malo que ha ocurrido; pero hago incapié en la autocrítica y admitir parte de la culpa, algo que no se hace y tanto echamos en cara al despropósito de clase política que tenemos.

              Y pillarme de malas, que eso también hace que me salte la vena «rage»

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              1. Coño, claro que los principales responsables son los borregos que votan sin saber qué votan. Estoy de acuerdo con que quien no se entera (bien, mal o regular) hoy en día es porque no le da la gana; y el voto de esas personas vale lo mismo que el mío y encima luego tienen las pelotas de quejarse. No nos engañemos, en España lo que hace falta es higiene. Higiene política, higiene en los tribunales (incluido el de cuentas), y no digo higiene en los medios de comunicación porque entraríamos en el tema de la libertad de expresión (aunque sí que sacaría la vara de medir para alguna que otra cosa que aparece en los medios). Desgraciadamente, el «vulgo» , ese español medio al cual te refieres que tiene tendencias políticas «desfasadas» (yo soy de derechas, asi que voto al PP. Putos Rojos.» » yo soy de izquierdas, asi que voto al PSOE, IU, loquesea. Putos fachas»), ya no tiene salvación ninguna. Seguirán así hasta que se mueran. De las generaciones venideras y su educación depende si esta subclase española (mayoritaria, pero inferior) se extinga con ellos o se perpetúe, perpetuando al mismo tiempo el status quo existente en este país, y a la cantidad ingente de sanguijuelas que están chupando la sangre a la mayoría aborregada y permisiva y a la minoría indignada (¿está permitido poner lo de indignado por aquí? :PPP)

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          2. Obiter dictum, pero… ¡Qué gusto encontrar por fin un aliado en la Guerra Memética! De verdad, me das ánimos. Ojalá otros entendieran de qué hablamos y la importancia de la higiene memética en las redes sociales.

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    2. Esta claro que (con diferente grado de responsabilidad eso si) la culpa principal de la deuda es de l@s que se han endeudado (es decir de TOD@S l@s españolit@s) o que por error u omision (sobre todo por omisión) han permitido que un@s y otr@s lo hicieran en su nombre…Y es muy muy facil ahora reprochar al «malvado usurero»…El «asunto» es que ahora todos los brillantes economistas del mundo mundial pretenden ahora que el «prestamista» (que por supuesto impone sus reglas) «fuerce la mano» en nombre de una supuesta «solidaridad europea»…. Si en lugar de alemania, el deudor fuera una «famiglia» siciliana o de Jersey ( o en su defecto continuasen existiendo de verdad las panzer-divisionen) a ver si a alguien se le ocurria intentar decirles lo que tienen que hacer para ayudarnos a pagar NUESTRA deuda con ellos….

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      1. Buena apreciación sobre lo de los prestamistas; tengo en el tintero un artículo haciendo un paralelismo entre “los judíos” y “los banqueros” respecto a como ambos han servido a la masa aborregada de Europa como tanto como prestamistas cómo como chivos expiatorios.

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  5. Bueno, en teoria el PP no es keynesiano ni socialdemocrata, por eso la oposicion no para de acusarles de mentir (lo cual no deja de ser chocante, porque resulta que al final estan aplicando bastantes de las medidas que les gustaria llevar a cabo a ellos, que si se definen asi).

    Esperaremos a que esa opinion liberal aclare conceptos, que veo a la gente mas perdida que el alambrito del pan Bimbo 🙂

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    1. No sé si estoy de acuerdo contigo, chico. Que el PP no es socialdemócrata está claro (aunque en realidad el tipo de demanda de Estado del Bienestar que tenemos y exigimos en España le haga gobernar con políticas que un estadounidense consideraría socialdemócratas) pero de ahí a que no sea keynesiano hay un mundo. Uno puede ser liberal y keynesiano, por ejemplo, lo que importa es si crees que Keynes tenía razón o no, y hoy en día la Teoría General es la Biblia de la economía. Las alternativas se consideran marginales, dogmáticas y acientíficas (y algo de verdad hay en ello, desde el comunismo a la escuela austriaca) así que, como decían por ahí… Say it loud, say it proud. We are all Keynesians now!

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      1. Que tenga anclajes consservadores no cambia el hecho de que es tan perteneciente a la tercera vía como el que más, y no hace falta irse tan lejos para comprobarlo. Pero hablando de los useños, allí está resurgiendo el liberalismo con Ron Paul, osea que ya no es tan marginal. En cualquiera caso que algo esté generalmente aceptado no lo hace irrefutable, y más cuando de hecho se sostiene sobre una concepción cientifista de la economía bastante discutible. Se puede ser liberal de muchas formas, desde la escuela de Chicago al anarcocapitalismo, lo que no puedes es declararte como tal y luego contradecirte aplicando políticas intervencionistas como las keynesianas. Al pan, pan y al vino, vino, el pastel se está destapando y no está todo el pescao vendido 😀

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  6. Ahora solo te falta explicar que otra forma de aumentar la demanda agregada real (Que no nominal) es la devaluación interna; y de porque los «analistos» no hablan de eso. Y de porque eso no les interesa a nuestros caciques.

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